MANUAL DE USO

10 Consejos para cuidar tu sartén antiadherente 1. Antes de utilizarla por primera vez, y después de cada uso, lava la sartén con agua caliente y jabón, enguágala y sécala con un paño suave. 2. Algunas sartenes antiadherentes del mercado son aptas para lavavajillas, 3. No utilices detergentes abrasivos ni esponjas de metal que puedan dañar las sartenes. Si los restos de alimentos se resisten, pon tu sartén antes en remojo con agua tibia y jabón. Si no limpias adecuadamente tus sartenes, pueden quedar capas finas de partículas de alimentos en la superficie que se queman cuando se recalienta y con el tiempo provocarán que los alimentos se peguen. 4. Las sartenes antiadherentes son ideales para cocinar con potencia media de calor. Si cocinas a temperaturas elevadas con ellas podrás deteriorar su parte antiadherente en un corto-medio plazo, además podría resultar perjudicial para la salud. 5. No precalientes la sartén sin nada dentro más de 1 ó 2 minutos, se deteriorará la parte antiadherente. 6. Escoge siempre una hornilla adecuada al tamaño de la base de la sartén, así conseguirás la máxima eficiencia y evitarás que se sobrecalienten las paredes laterales o los mangos. En la cocción con gas, las llamas deben quedar dentro de la zona de la base de la sartén, asegúrate que nunca alcancen las paredes laterales. Y si tu cocina es de inducción, recuerda que el diámetro del fondo de la sartén tiene que ser igual o casi igual que el fuego de tu encimera. 7. No utilices utensilios metálicos cuando estés utilizando tu sartén, ni con puntas afiladas o bordes. esto puede provocar que el antiadherente se ralle o pierda su función. Por el contrario, utiliza utensilios de silicona, nylon o madera, aptos para el contacto con los alimentos. Es necesario proteger el antiadherente de la mejor manera, así estaremos seguros que está en perfectas condiciones. Asimismo, nunca trocees o cortes alimentos o utilices la batidora eléctrica en la sartén. 8. Evita someter las sartenes a cambios bruscos de temperatura, como ponerlas debajo del grifo con agua fría justo después de cocinar. Los contrastes térmicos estropean las sartenes. Deja que la misma se enfríe y después vierte el agua. Si echas agua estando la sartén caliente provocaras que su capa antiadherente se debilite. 9. Si almacenas tus sartenes antiadherentes una encima de la otra, te recomendamos colocar un protector de sartenes entre ellas para evitar que puedan rayarse. 10. Levanta la sartén cuando quieras moverla, sobre todo si la encimera tiene la placa de vidrio. No lo deslices, ya que puedes dañar tanto la base como el cristal.